
El trabajo en gastronomía depende de cada sector para funcionar correctamente, por lo tanto es un trabajo de Equipo y es por ello que estar en armonía con nuestro grupo de trabajo es fundamental. Si bien no es necesario tener una amistad con nuestros compañeros, sí es necesario tener una buena relación.
Interesarnos por el trabajo de nuestros compañeros, conocer sus funciones y horarios, sus fortalezas y debilidades. Saber los nombres de todos, saber la plaza de cada mesero y cuál es su relación con los clientes, es fundamental para planear la localización de las reservas y administrar mejor la lista de espera.
Si conocemos bien los camareros del lugar y cómo trabajan, sabremos quién maneja mejor los tiempos, quién es capaz de atender con más agilidad y maneja mejor la plaza llena, quién tiene más paciencia para atender familias, quién es más apto para atender mesas corporativas, o mesas numerosas etc. Conocer el trabajo de todos nos facilita nuestro trabajo, ya que podemos ayudar en momentos de mucho movimiento de clientes y nos da herramientas para atender mejor nuestra espera.
Si tuviéramos un problema con algún compañero debemos tratar de solucionarlo de la mejor forma posible, nunca delante de los clientes ni durante el servicio, siempre apelando al diálogo
y si no podemos solucionarlo, buscamos ayuda del encargado responsable.
Para mantener una buena relación de grupo es fundamental conocer a nuestros colegas, conocer y respetar sus trabajos, trabajar junto con ellos, ayudar en las tareas de cierre. Colaborar en todo lo que nos sea posible. Nunca involucrarnos en charlatanerías ni mucho menos empezarlas. Debemos ser profesionales y no mezclar nuestra vida personal ni llevar problemas personales problemas a nuestro lugar de trabajo.