
El hostess es, además de recepcionista, un comunicador (RRPP) y un vendedor de
la experiencia que nuestro lugar de trabajo ofrece.
Aprendizajes para llevarme de la Profesión
Como Hostess nuestra responsabilidad comercial es sobre la totalidad del lugar en que trabajamos. Al ser quienes recibimos a los clientes, somos los encargados de contarles cómo funciona el lugar, si contamos con un salón adicional, terraza, si tenemos algún evento especial disponible o alguna característica atípica en nuestra cocina, en la manera en que se sirven los platos (por ej. el espeto corrido) o incluso en las modalidades de pago. Contar la propuesta integral y lo que nos destaca, es nuestra responsabilidad, tanto como recibir bien a nuestros clientes. Somos los primeros anfitriones con los que se encuentran!
Como vendedores, tenemos que ser conscientes de qué le conviene más ofrecer al local. A veces son los tragos de recepción, a veces son los platos principales (que ya podemos ir recomendando sutilmente), a veces son nuestros postres. En algunos lugares, lo conveniente puede ser incluso una barra con selección de habanos. Si hubiera una visita especial, como la de un bartender o chef famoso, o una selección especial de quesos y vinos disponible o cualquier evento a destacar, la primera recepción es un buen momento para mencionarlo. No sólo ubicamos gente en las mesas o constatamos que hayan hecho un reserva, nuestro rol es ser anfitriones y vendedores de toda la experiencia que ofrecemos.
Por otra parte, tenemos la oportunidad de sugerir y coordinar con los dueños, maneras de atraer clientes que están fuera de nuestro local.
Tenemos que entender la zona de influencia de nuestro local de trabajo y los horarios en que la gente se mueve por ella. Si tenemos comercios grandes en la zona, podemos acercarnos y proponerles que nos refieran clientes con alguna promoción especial.
Vamos a ver cuatro ejemplos posibles para tener en cuenta:
- Concesionaria de autos en las proximidades, proponerles recibir al asesor comercial para almuerzo o cena con brindis, cada vez que se cierre una venta.
Lo mismo podría sugerirse con comercios afines como una inmobiliaria.
Esto nos sirve a nosotros y también al comercio.
- Comercios de ropa y venta minorista, pueden referirnos con una promoción específica que nos haga saber que son ellos quienes derivadon a esos clientes. Si les ofrecemos un voucher especial a esos comercios, podemos también identificarlos y reconocerles económicamente la sugerencia. También podemos acercarles a sus empleados viandas o platos convenientes (sandwichería, tortas o cafetería) con descuentos especiales, para que tengan un buen refrigerio en su jornada laboral.
- Edificios corporativos, podemos proponer menús especiales para los empleados con una rotación nutritiva o saludable y un descuento especial. Podemos incluso pensar en abonos mensuales para esas corporaciones y hacer un delivery a sus oficinas en horarios en que sea conveniente para nuestra cocina, o sea, horarios de poco flujo de clientes como puede ser el desayuno o la merienda en el caso de los restaurantes. De esta manera nos aseguraremos de una demanda en espacios que habíamos dado por perdidos, y al mismo tiempo, es una gran oportunidad para que éstos nuevos clientes nos tengan en cuenta durante el almuerzo y cena y fines de semana.
- Zonas residenciales, en caso de haber edificios residenciales cerca, es importante conocer a sus encargados y administradores, para que tener acceso a las personas que viven allí y los medios para comunicarles propuestas especiales, ya que son nuestros vecinos.
- Cartera de clientes propia (el verdadero RRPP del lugar)
Muchas veces los restaurantes no tienen organizada una base de datos en que aparezcan los nombres y visitas de los clientes. Si embargo, en nuestra posición de hostess, tenemos la oportunidad de ir construyéndola poco a poco. Tenemos, como hostess, un gran acceso a los datos de los clientes, atendemos sus llamados, nos dejan sus nombres, télefonos e e-mails de contacto, y también, al recibirlos personalmente podemos relacionar los datos a la persona, es decir ponerle una cara al nombre. Es muy importante entender el valor que esto tiene, es una oportunidad única, no sólo para el local gastronómico en que trabajamos, sino para toda nuestra carrera dentro de la gastronomía.
Es decir, a la vez que construimos una base de datos útil para nuestro local de trabajo, lo hacemos también para nosotros mismos.
Si nos toca trabajar en otro lugar, ya tenemos potenciales clientes que podemos acercar a él. Y si, al mismo tiempo, nos encontramos con clientes que reconocemos de otros lugares, ya podemos saludarlos con el nombre y establecer una relación cordial para el nuevo lugar.
De esa manera aportamos valor, para el lugar en que trabajamos y también para los que vayamos a trabajar en el futuro. Nos damos a conocer a nosotros y si logramos construir una cartera de clientes propia, que confía en nuestras recomendaciones, es el puntapié inicial para construir nuestra carrera como Relaciones Públicas (en caso de que nos interese).
Entendamos que en el momento de espera, el cliente realmente nos está prestando atención y aunque sean pocos minutos, si lo atendemos bien, nos reconocerá favorablemente en el futuro. Si nosotros los reconocemos a ellos, pasarán a ser parte de nuestros contactos personales, posiblemente por mucho tiempo.
Las relaciones se construyen en el tiempo, de a poco y paso a paso.
Es importante que si hemos reconocido a un cliente en alguna oportunidad, no nos olvidemos de él en la próxima visita. Por eso, entre otras cosas, es importante que documentemos, aunque sea para nosotros, quiénes y cuándo nos visitan. Siempre manteniendo la discreción, pero ofreciendo el reconocimiento adecuado a las personas.
De esta manera, iremos ganando permisos reales, para ofrecer actividades, eventos o incluso hacerlos partícipes de promociones del propio restaurante. Para que estén interesados en aparecer en nuestras redes sociales o concursos, antes debemos tener una relación de una cierta confianza ganada en el tiempo de manera armónica.
Apurarse en esto es la receta para el fracaso. Nunca hay que apurar excesivamente una relación comercial.
- Manejo de Redes (generación de fotos y contenido propio según día, invitados, eventos, famosos)
En estos tiempos, es imprescindible ir creando la propia imagen profesional, ya que hay muchas herramientas para hacerlo y nuestro rol como hostess nos da un montón de oportunidades para ello. Estamos en contacto permanente con gente que nos visita, muchas incluso famosos o personas públicas. Siempre en coordinación y con la aprobación del lugar en que trabajamos, es importante tener algunas fotos de nuestra participación en eventos, recibiendo gente, en la entrada del lugar en que trabajamos e incluso con nuestros compañeros y propietarios del lugar. Mostrarnos trabajando, nos permitirá también recibir ofertas laborales de otros lugares, incluso para trabajar en otros países y ciudades.
Por otro lado, si mis jefes están de acuerdo, podemos ofrecerles a los clientes de nuestra confianza, sacarse una foto a la salida de su visita, dejarnos algún comentario de cómo la pasaron y que ésta aparezca tanto en la red del lugar, como en la propia (además de compartirlo con las redes de nuestros clientes). En general, es bien recibida la propuesta de sacar una foto a quienes nos visitaron y es una gran oportunidad para tener las direcciones personales de todos los involucrados.
Si nuestro lugar de trabajo aún no ha desarrollado su propuesta de marketing digital, estos es un aporte valioso que podemos brindarles, que nos hará mucho más atractivos como posibles empleados. Encargarnos de este manejo, puede parecer un trabajo extra en un principio, pero con el tiempo, se vuelve muy sencillo y reconfortante. Y además, útil a largo plazo para nosotros y nuestra carrera.
Desafios de la profesión
- Desarrollar la capacidad de comunicación.
- Lograr una buena relación de grupo.
- Lograr una buena capacidad de gestión y organización.
- Desarrollar nuestra visión comercial.
- Desarrollar la vocación e servicio, empatía y proactividad.
- Llegar a ser el representante del local y que el local me represente.